“Bienaventurados los que
trabajan por la paz”. Fue el Mensaje de Benedicto XVI para la Jornada Mundial
de la Paz 2013, presentado en la Oficina de Prensa de la Santa Sede. Pasando
revista a los diversos ámbitos humanos en los que trabajar por la paz es
posible, es un derecho y un deber. “Una condición previa para la paz, destacaba
el entonces Papa en el mensaje, es el desmantelamiento de la dictadura del
relativismo moral y del presupuesto de una moral totalmente autónoma, que
cierra las puertas al reconocimiento de la imprescindible ley moral natural
inscrita por Dios en la conciencia de cada hombre”.
El mensaje empezaba señalando
que “cada año trae consigo la esperanza de un mundo mejor”. Y pedía a Dios,
“Padre de la humanidad, que nos conceda la concordia y la paz, para que se
puedan cumplir las aspiraciones de una vida próspera y feliz para todos”.
Pienso que es bueno señalar la conveniencia del desmantelamiento de la
dictadura del relativismo como condición previa para conseguir la paz.
Suso
do Madrid
No hay comentarios:
Publicar un comentario